Raqchi es cuna del turismo vivencial en Perú
Vivencias con descendientes de los incas, fogatas bailables, artes de cerámica, naturaleza, y un sitio arqueológico que mantiene vivo el antepasado, se mezclan al sur de Cusco en un pueblo turístico llamado Raqchi, el cual se ubica en el kilómetro 119, en la carretera vía a Sicuani, en la provincia de Canchis.
Raqchi es una cuna del turismo vivencial en Perú, un estilo de viaje que se basa en las conexiones significativas con personas locales, que un turista puede vivir en el lugar al que llega, y a su vez, una integración en la cultura, tradiciones y comunidades locales, de acuerdo con el Centro Europeo de Postgrado.
Los pequeños lazos que se crean en dicho pueblo son a través de servicios turísticos que brindan pobladores de la zona, que consisten en un paquete de visita al complejo arqueológico de Raqchi, comida en casa de los habitantes, quienes se dedican a cocinar platos autóctonos de Cusco, para compartir con los atraídos por este tipo de actividad turística.
Además, los asistentes duermen en el hogar de los pobladores de la zona, pero antes disfrutan de una fogata bailable vestidos con trajes típicos y de un taller de cerámica.
Todo este estilo de viaje a Raqchi tiene un costo de 150 soles por persona, e incluye todas las experiencias antes descritas, además de un desayuno y cena con recetas incaicas, donde la lengua quechua se conserva, y se hace presente en las conexiones humanas que nacen a partir de las vivencias en aquel pueblo ubicado al sur de la capital del imperio inca.

Complejo arqueológico de Raqchi
Raqchi es un pueblo muy tranquilo que se compone por una plaza, una iglesia y una pequeña feria de venta de artesanías de cerámica y tejidos andinos, que todo esto junto adorna la entrada al complejo arqueológico de este atractivo turístico.
El museo al aire libre está conformado por el templo Wiracocha, las fuentes, los aposentos y el sector Qalqas, los cuales se pueden conocer en una tarde de visita.
La entrada a este sitio histórico cuesta 20 soles para turistas nacionales y extranjeros, y 10 soles para estudiantes. Este boleto se puede adquirir en el mismo centro de historia inca.
El horario de atención de este espacio cultural es de 7:00am a 5:30pm, de lunes a domingos.
Si solo quieres conocer la arqueología de Raqchi y no vivir aún la experiencia de turismo vivencial, es importante destacar que cerca de la plaza no hay alojamientos, si no que tendrás que bajar a la carretera y tomar un colectivo a el pueblo de San Pedro, unos 15 minutos más adelante con un sol de pasaje. Allí hay varias opciones de hoteles, donde la noche oscila entre 15 y 40 soles.
El legado de Raqchi
La cerámica en Raqchi es un legado que proviene de los tiempos ancestrales, que ha sido transmitida de generación en generación, según una valla puesta en el centro de arqueología de este rincón andino.
“La iconografía de Raqchi es de estilo inca, compuesta por representaciones y simbologías decorativas, como líneas paralelas, rombos, cuadros y triángulos, imágenes de plantas e insectos, aves, peces, serpientes, camélidos, y personas con trajes antiguos”, reseñaba el gran escrito.